Experiencias por WhatsApp

Caminamos junt@s un poquito cada día.

 

A lo largo de estos años, de vez en cuando sentía ganas de compartir con la gente a través de un medio tan cercano y directo como el teléfono móvil

Sentía el impulso de abrir mi vida, mi corazón y dedicarme cada día a compartir todo lo que aprendía y experimentaba ese día. Lo compartía al momento, como si entendiera que lo que se me estaba regalando a mí era para compartirlo con tod@s…

Fueron tres experiencias increíbles.

Unos años después, todavía se apuntan
personas cada mes a hacerlas.

Conservan la esencia fresca de cuando las caminé porque los mensajes son atemporales y se reciben siempre justo en el momento que se necesitan.

Conectados Alicia Sánchez

Conectad@s

Ya sabes que me apasiona vivir, me fascina la forma en que todo se despliega. Observar como toda mi experiencia tiene un tiempo para la expansión y luego un tiempo para la retracción. Todo se abre y se cierra en un ciclo natural y orgánico del que somos parte.

Hay un tiempo para proyectar y un tiempo para soltar, un tiempo para sembrar y otro para cosechar, un tiempo para salir hacia fuera y uno para entrar hacia dentro, y todo se te muestra con tal naturalidad y sencillez que nos pasa desapercibido.

Quiero invitarte a darte cuenta de dónde vives, a sentir el fluir que también te está llevando a ti (incluso cuando te resistes). Quiero invitarte a VIVIR, en mayúsculas. Será como caminar junt@s durante 3 meses.

Volver a casa

Una experiencia de 30 días recibiendo un WhatsApp diario.

Volver a casa huele a descanso, a zapatillas cómodas, a jersey calentito, a calor del fuego…huele a carícia, a largo abrazo…huele a risa con los amigos, a mirada de tu madre, a los jazmines del patio…

Volver a casa es algo interno. Y justo en ese momento que lo vislumbras…ya no necesitas ir a ningún sitio más, encuentras TODO en todo. Te ves complet@ y de repente, a tu vida, ya no le falta nada.

Apto para tod@s aquell@s que sientan, dentro de sí mism@s, que desean: «VOLVER A CASA».

Bajar de la montaña rusa

Tod@s vivimos en una montaña rusa…
Por la mañana estamos encantad@s de la vida y por la tarde, sentimos que nada tiene sentido. A las 12h amamos a nuestras parejas y a las 12:30h nos plateamos dejarlas.

Vamos de una emoción a otra, arrastrad@s por ellas y eso… NOS AGOTA.

¿Quieres saber un secreto? La montaña rusa no se para, pero tú te puedes bajar. ¿Te apetece explorar esta posibilidad?

Un mes recibiendo un, a veces dos, mensajes diarios. Podrán pasar cosas (porque pasan cosas), podremos sentir emociones, pero podremos no vernos arrastrad@s por ellas constantemente. Así se descansa.

Unos años después, todavía se apuntan
personas cada mes a hacerlas.

Fueron tres experiencias increíbles 🌺.